Staropoli va inspirado a su combate.

La tarjeta del sábado 5 de junio en UFC Apex contará con una doble presencia argentina. Laureano ‘Pepi’ Staropoli en su debut en el peso medio contra el georgiano Roman Dolidze y Santiago Ponzinibbio contra el puertorriqueño Miguel Baeza.

Staropoli quiere romper una racha de dos derrotas consecutivas y se atrevió a tomar la pelea con sólo 15 días de anticipación debido al buen estado físico en el que se considera, ya que dejará las 170 libras para hacer su primera incursión en las 185.

“Mi cuerpo sufre mucho cuando corto tanto peso. Ahora en 185 me voy a sentir mucho mejor, siento que en esta categoría puedo dar lo mejor de mí. Hoy sinceramente no me siento presionado ni con la obligación de ganar. Sólo estoy enfocado en traer el mejor resultado para mi país y para toda la gente de Latinoamérica que afortunadamente me sigue”, explicó Laureano.

Será la segunda vez que pelee junto a Ponzinibbio, oriundo, como él, de La Plata y espera que la cábala funcione, porque la única vez que compartieron cartelera, en noviembre de 2018, ambos salieron con la victoria. “Tengo mucho aprecio por Santiago, fue mi referente número uno y le tengo mucho aprecio y encima vamos a salir a festejar en Las Vegas”, relató ‘El Matador’.

Acostumbrado a hacer sus campamentos en Brasil, con el equipo Chute Boxe de Diego Lima, la pandemia lo obligó a quedarse en su país y fue una grata sorpresa.

“La verdad es que fue espectacular, porque vine a Argentina con la idea de hacer una preparación física óptima. Estaba por ir a Brasil a hacer sparring y no tuve tiempo porque me ofrecieron la pelea. Pero sigo con buen ritmo y quiero mostrar lo que vengo trabajando desde hace tiempo. Fue bueno añadir el elemento de estar cerca de mi familia y amigos, normalmente hago el campamento solo. Ahora estaba en casa de mi madre, con un apoyo increíble, me siento blindado, indestructible”, explicó.

Sabe que Dolidze será un rival más grande y que también baja de semicompleto a mediano, pero hoy tiene una gran inspiración para llegar lejos en su nueva categoría, porque su compañero Charles Oliveira le ha dejado claro que el objetivo de ser campeón de la UFC está al alcance de la mano y explicó: “No sabes lo orgullosos que nos sentimos. Hoy mi referencia número uno en todo el mundo es mi compañero Charles. Él es mi ejemplo a seguir, no sólo como luchador sino como persona, porque muchos se fijan en el que se sube al Lamborghini, con dinero, en el yate y con esas cosas materiales que al final no valen nada. Yo veo a Carlos llenando un camión de comida y llevándolo a las familias, quiero tener dinero para poder ayudar a los demás, eso no tiene precio”.

Esta motivación le hace soñar a lo grande, con un recibimiento similar al que tuvo ‘Do Bronx’ cuando llevó su cinturón a la favela: “Me veo así, mi gente se lo merece”. Si Charles fuera argentino habría llenado un estadio, el argentino es muy fanático, de todo, del fútbol, de la política. Si ahora tengo dos victorias y dos derrotas, tengo el cariño de mucha gente, sé que voy a llegar lejos”.

La tarjeta del sábado también contará con el peruano Claudio Puelles contra Jordan Leavitt y estará encabezada por los pesos pesados Jairzinho Rozenstruik y Augusto Sakai.