Los que no esperábamos tan arriba: Grizzlies
No hace tanto tiempo que los Memphis Grizzlies eran uno de los rivales más complicados y respetados de la Conferencia Oeste. Liderados por Mike Conley, Zach Randolph y Marc Gasol, entre otros, tenían siete apariciones consecutivas en la postemporada, incluyendo las finales de conferencia en 2013.
Pero con el paso del tiempo, el equipo se desmanteló hasta tal punto que hubo que reconstruir la plantilla.
Fue entonces cuando, en el draft de 2019, seleccionaron al base Ja Morant con la segunda elección del draft. Lo que el resto de la NBA no visualizó fue que, estos jóvenes y ‘hambrientos’ Grizzlies, volverían a ser contendientes antes de lo previsto.
Actualmente, Memphis ocupa el tercer puesto del Oeste con un récord de 32-17 y Morant está -si está sano- entre los principales candidatos al MVP.
¿Cuáles han sido los factores detrás del buen estado de forma de los Grizzlies?
Rifirrafa con Iguodala
Uno de los puntos de inflexión de este conjunto, fue cuando el escolta Dillion Brooks salió en 2020 a la palestra ante la noticia de que el que fuera MVP de las Finales de 2015, Andre Iguodala, prefería no jugar esa temporada. Prefería que los Grizzlies lo cambiaran a otro equipo con posibilidades de llegar a los playoffs.
“No puedo esperar a que lo canjeemos, para demostrar a la gente lo buenos que somos”, escribió Brooks en las redes sociales. Morant estuvo de acuerdo.
Más tarde, después de un intercambio en las redes sociales con el base estrella de los Warriors, Stephen Curry, Morant explicó por qué tuvieron un desencuentro: “Cuando me enteré de que Iguodala iba a estar en nuestro equipo, me emocioné porque podía aprender mucho de él. Cuando vi su actitud, tuve que cambiar la mía”, añadió.
Iguodala, al igual que el resto de la liga, no sabía lo que le esperaba.
Morant, al igual que hizo Derrick Rose con los Bulls en 2011, ha enamorado, no sólo a sus seguidores, sino al mundo del baloncesto en general. Su electrizante forma de atacar la canasta, de crear jugadas y de saltar por encima de quien se le ponga por delante ha convertido a los Grizzlies en una “televisión imprescindible” noche tras noche.
Pero los Grizzlies no son sólo Morant. Su buen momento tiene, además, otros responsables.
Desmond Bane, el ‘arma secreta’.
A estas alturas, los 30 equipos de la NBA son conscientes de la amenaza que suponen los Grizzlies. Pero a principios de temporada, viendo la plantilla de Memphis, quizá se podía intuir un paso adelante del propio Brooks o de Jaren Jackson Jr, pero lo que nadie vio venir fue a un candidato favorito al Most Improved en Desmond Bane.
Bane registró 17,7 puntos, 4,4 rebotes y 2,4 asistencias y fue fundamental para que los Grizzlies siguieran ganando incluso sin Morant a lo largo de 11 partidos.
El año pasado, sólo anotó 9,2 puntos por partido.
El escolta, cuestionado porque su envergadura es menor que su altura (1,90 m), fue originalmente reclutado por los Celtics en 2020, pero traspasado a Memphis por dos selecciones de segunda ronda.
Todavía en diciembre, se convirtió, junto con Morant, en el primer dúo de perímetro en la historia de la organización en anotar cada uno al menos 30 puntos durante un solo partido.
Gracias en parte a Morant, Bane y el resto de los jugadores mencionados, los Grizzlies lideran la liga en promedio de anotación en la pintura, contraataques y segundas oportunidades, según ESPN Data.
En las últimas 25 temporadas, el único otro equipo que lideró la liga en las tres categorías fueron los Nuggets de 2012-13, que terminaron 57-25.
La veteranía y presencia física de Steven Adams ha ayudado enormemente, además, a unos Grizzlies que no temen a nadie.
Taylor Jenkins, de la escuela de Budenholzer
Taylor Jenkins, de Memphis, fue nombrado entrenador del mes de diciembre. Consiguió un récord de 12-4. Ganó dos veces a Los Ángeles Lakers, así como a los Phoenix Suns, Miami Heat y Philadelphia 76ers. Se ha convertido en uno de los 10 mejores entrenadores de la liga.
Jenkins viene de la escuela de Mike Budenholzer, actual entrenador de los campeones Milwaukee Bucks.
Estuvo en Milwaukee hasta 2019 cuando fue elegido como artífice de la reestructuración de los Grizzlies. Antes de los Bucks, fue igualmente asistente de Budenholzer en los Atlanta Hawks durante un lustro. Jenkins es un claro candidato a la extensión.
Podrán los Grizzlies contender por un título este año? No.
Ahora, Memphis no es conocido principalmente como un gran destino para jugar en la NBA. Es un equipo de mercado pequeño.
Sin embargo, Morant y compañía están abriendo “la puerta”, en los próximos años, para que otro tipo de estrellas se animen a jugar en los Grizzlies. Esas que necesitan para ganar a Milwaukee, Brooklyn o Golden State en unas hipotéticas Finales.
Mientras tanto, Memphis está en alza. No hay quien pare a Morant. Y si el resto de la liga no se prepara para este ‘asalto’ de los Grizzlies, entonces será demasiado tarde. No temen a nadie.