La clave para que los Celtics ganen
El sexto partido de las Finales de la NBA será en casa para los Celtics en una serie en la que han perdido la ventaja que tenían contra los Golden State Warriors.
Y no sólo ha perdido Boston la ventaja, sino también el impulso.
Los Warriors llevan una racha de dos victorias en las Finales y tienen la motivación de ganar el sexto partido para conseguir su cuarto título en la era Stephen Curry-Draymond Green-Klay Thompson-Steve Kerr.
Pero, ¿qué tiene que hacer Boston para ganar el sexto partido y alargar las Finales a un séptimo partido definitivo?
1- La clave para que los Celtics ganen el sexto partido es ….
Hay varias…
Dado que es casi imposible parar la ofensiva de los Warriors, como se vio en el quinto partido, donde los triples de Stephen Curry no hicieron ‘falta’, por así decirlo, Boston debe cuidar el balón. En estas Finales no ha habido peor enemigo para los Celtics que ellos mismos.
Boston promedia cuatro pérdidas de balón más que Golden State durante las actuales Finales. Esa es la mayor diferencia entre dos equipos aspirantes al campeonato desde las Finales de 2005 entre los Detroit Pistons y los San Antonio Spurs, según Second Spectrum.
Un dato revelador sobre el cuidado que debe tener el equipo del entrenador Ime Udoka para el sexto partido con respecto al balón: En los cinco partidos anteriores, los Warriors han anotado 66 puntos gracias a las pérdidas de balón de los Celtics, que, a su vez, suman 42 puntos gracias a las pérdidas de balón de San Francisco.
Otro punto. Jayson Tatum está más que obligado a mejorar su tiro en la pintura. La estrella de los Celtics está tirando un 36% en la pintura durante esta serie definitiva.
Pero, a favor de los Celtics está la historia (que nunca juega). Golden State tiene un récord de 0-3 en la actual postemporada cuando se le da la oportunidad de cerrar una serie fuera de casa, por lo que Boston puede apelar a esa estadística para salir airoso el jueves por la noche y, por si fuera poco, recordemos que Boston eliminó a los Milwaukee Bucks en 7 partidos en estos playoffs y también a los Miami Heat, por lo que no hay que dar por hecho que el campeonato de la NBA se cierra en el TD Garden, sino que se celebra en San Francisco.
2- ¿Cómo pueden los Celtics neutralizar a los Warriors?
Los Warriors son tan efectivos en la cancha, un equipo que conoce y ejecuta su estilo de juego a la perfección, que la única forma de neutralizarlos es evitar, en la medida de lo posible, que se sientan cómodos en la cancha.
Los jugadores de los Celtics deben ser agresivos en su defensa, jugar entre la línea de lo reglamentario y lo no reglamentario, apoyarse en su afición para presionar a Golden State e intentar romper ese cuarteto formado por Curry, Thompson, Green y Wiggins.
No es sencillo. Boston tiene que neutralizar al máximo a las cuatro estrellas de los Warriors. En el quinto partido impidieron que Curry anotara un tiro de tres puntos y ni siquiera así consiguieron la victoria.
Y si pueden hacer todo esto, será sólo la mitad del trabajo.
Para terminar de neutralizar a los Warriors, los Celtics necesitan ejecutar su juego, reducir las pérdidas de balón y ser efectivos en la línea de tiros libres. En esos pequeños y peliagudos detalles está la diferencia entre ser un campeón de la NBA o el primer perdedor.
3- Realidad o ficción: Wiggins es el mejor defensor al que se ha enfrentado Tatum en todos estos playoffs.
Realidad. Como bien advirtió el base Tyrese Haliburton en el podcast de JJ Redick hace unas semanas, Wiggins era el defensor que más dificultades podía presentar a Tatum. Y no se equivocó. No porque sea el mejor defensor de la NBA, ni mucho menos, sino por su altura, rapidez, ‘IQ’ y brazos largos.
Tatum registra 5-21 para un 24% en los cuartos periodos contra los Warriors en las Finales, camino de ser el peor porcentaje de tiro de campo (en esos parciales) desde las Finales de 2003. Wiggins tiene mucho que ver con eso.
Además, ocho de las 18 pérdidas de balón de Tatum se han producido mientras driblaba, añade Stats & Info. Muestra algunas dudas cuando ataca la canasta.
Dicho esto, Wiggins se ha convertido en el segundo mejor jugador en los dos últimos partidos de un Golden State que se ha dejado llevar por Stephen Curry esta postemporada. No sólo en ataque, sino también en la pintura, capturando 29 rebotes en los dos últimos duelos.
El efecto Wiggins ha hecho lo que PJ Tucker y Giannis Antetokounmpo no consiguieron en rondas anteriores: hacer que Tatum pierda la confianza. Sus porcentajes de tiro por periodo en estas Finales han sido del 56% en el primero, 34% en el segundo, 33% en el tercero y 24% en el cuarto. Cuanto más avanza el partido, más le molestan Wiggins y compañía. Como dice el refrán: la defensa gana campeonatos.