Vía libre para jugar con México

El jardinero cubano de los Tampa Bay Rays, Randy Arozarena, ya obtuvo la ciudadanía mexicana, único obstáculo legal que tenía pendiente, en sus planes de jugar con la camiseta del “Tri” en el próximo Clásico Mundial de Béisbol.

“Me hice ciudadano mexicano, gracias a Dios. Ya soy uno de ellos”, dijo Arozarena.

“Agradezco a México por recibirme. Siento que represento a los mexicanos en las Grandes Ligas y me gustaría representar los colores [mexicanos] en el Clásico Mundial del próximo año”, agregó el pelotero.

Arozarena salió de Cuba en un barco en junio de 2015 y se instaló en Mérida, México, donde fue firmado por los Cardenales de San Luis de las Grandes Ligas de Estados Unidos 13 meses después, y es el lugar de nacimiento de su hija. Desde entonces, ha predicado públicamente su aprecio por México y sus intenciones de jugar con su selección.

La quinta versión del Clásico Mundial de Béisbol, el único evento de naciones en el que participan jugadores de las Grandes Ligas, estaba programada para celebrarse en marzo de 2021, pero fue cancelada debido a la pandemia del coronavirus. El torneo que reconoce al campeón mundial en el nivel más alto del béisbol fue reprogramado para marzo de 2023.

Un jugador es elegible para participar en un conjunto del Clásico Mundial de Béisbol si es ciudadano de la nación representada por el equipo o está calificado para la ciudadanía o para tener un pasaporte bajo las leyes de una nación representada por un equipo o es un residente permanente legal de la nación o territorio representado por un equipo.

Arozarena debutó en las Grandes Ligas con San Luis en 2019, pero saltó a la fama internacional con los Rays en la postemporada de 2020, cuando conectó 10 jonrones y fue el Jugador Más Valioso de la Serie de Campeonato de la Liga Americana contra los Astros de Houston. Conectó tres de sus jonrones en la Serie Mundial, pero no pudo evitar que los Rays cayeran ante los favoritos Dodgers de Los Ángeles.

En su búsqueda por obtener la ciudadanía mexicana, Arozarena se dirigió públicamente al presidente del país, Manuel López Obrador, en febrero del año pasado, durante una conversación en directo en su cuenta de Instagram. Semanas después, el mandatario comentó la situación del jugador.

“Se trata de un beisbolista de origen cubano, que estuvo en México, luego se fue a las Grandes Ligas y participó en la última Serie Mundial; se destacó porque rompió récords de bateo. Un fenómeno del béisbol, parece que está casado o tiene familia en México y quiere tener la nacionalidad mexicana, para representarnos”, dijo López Obrador durante un encuentro con los medios de comunicación.

“Vamos a pedirle a Francisco Garduño, que es el director de Migración, que se ponga en comunicación con él y lo vea. Como me gusta el béisbol, les puedo decir que hace mucho tiempo que no veía un bateador tan efectivo como Arozarena”, agregó el presidente mexicano.

“Ellos [los dirigentes de la federación mexicana de béisbol] se han comunicado conmigo, sólo están esperando mis papeles, que gracias a Dios ya fueron emitidos, y ahora sólo estoy esperando que llegue el torneo para poder estar con ellos”, dijo Arozarena.

“Ese ha sido mi objetivo desde que llegué a México. Me puse la meta de representar a México en el Clásico Mundial y espero que se cumpla en el próximo”, agregó el jugador de 27 años.