Los que no esperábamos tan arriba: Cavaliers

Estar en el quinto puesto de una conferencia en la que tienes que luchar contra equipos como los Brooklyn Nets, el actual campeón Milwaukee Bucks, y mirar por encima del hombro a equipos como los Boston Celtics y los Philadelphia 76ers, parecería imposible para una franquicia que lleva un par de temporadas en reconstrucción. Sin embargo, los Cleveland Cavaliers pueden mirar de frente a cualquiera que lo dude.

La última vez que la franquicia de Cleveland estuvo en puestos de Playoffs fue en la temporada 2017-18, cuando amarraron su División al ocupar el cuarto lugar gracias a un récord de 50-32 (.610) y a que aún contaban con LeBron James en sus filas.

Al final de esa campaña, el ‘Rey’ decidió mudarse a Los Ángeles y se produjo la debacle de Cleveland.

Para la temporada siguiente, el equipo se hundió hasta el penúltimo lugar del Este al registrar un lamentable 19-63 (.232) y, peor aún, fue la temporada siguiente, cuando el equipo se ubicó último en el Este al terminar con un récord de 19-46 (.292).

Hubo algunos movimientos, cambios en el banquillo y en el roster, pero las cosas no mejoraron y en la 2020-21 el equipo quedó lejos de los playoffs, siendo penúltimo con un récord de 22-50 (.306), algo inconcebible para una franquicia que durante varios años fue el antagonista por excelencia en las Finales de los Golden State Warriors.

Pero la revancha llega pronto en la NBA y los Cavs hicieron los movimientos correctos en el Draft y la agencia libre y ahora pueden considerarse una de las sorpresas de la temporada. Su 27-19 (.587) lo confirma.

Darius Garland, Jarrett Allen y Collin Sexton, un Big Three infravalorado

Mucho se habla del ‘Big Three’ de franquicias como los Nets, Los Ángeles Lakers, Bucks, Phoenix Suns; sin embargo, el bajo perfil de los tres pilares de los Cavs puede ser la clave de su reciente y, para muchos, inesperado éxito.

Garland, Allen y Sexton forman uno de los tríos más completos de la Asociación.

El base Garland, hijo del ex jugador de la NBA Winston Garland, está aportando 19,8 puntos por noche junto con 8,0 asistencias y se ha convertido en una de las revelaciones de la Asociación con un futuro prometedor.

Garrett Allen, “infravalorado” por los Nets, está demostrando que la eficacia y la popularidad se sirven en platos diferentes. El pívot de pelo retro es una garantía en la pintura: 10,9 rebotes por partido le sitúan como uno de esos raros “objetos de deseo” para cualquier entrenador.

Por último tenemos al base de tercer año Collin Sexton, con un All-Rookie en su carrera, el PG, que el pasado 4 de enero celebró 24 vueltas al sol, se ha erigido como uno de los jugadores favoritos de la afición de Ohio. Su juego dinámico convierte a los Cavs en un quinteto espectacular cuando él está en la cancha y si a eso se le suman sus promedios de 16,0 puntos, 3,3 tableros y 2,1 asistencias por noche, Cleveland puede consolarse con el alentador panorama que le espera.

PROFUNDIDAD EXPERIMENTADA

A estos jóvenes Cavs les ha servido de mucho tener un respaldo en la segunda unidad con elementos del calibre del All-Star como Kevin Love y más recientemente Rajon Rondo, quien fue traspasado debido a la baja de Ricky Rubio en la temporada. Cedi Osman, Lauri Markkanen e Isaac Okoro dan al entrenador J.B. Bickerstaff el estatus de ‘caballo negro’ de cara a los Playoffs.